Comentario
Las áreas culturales de América del Sur se están redefiniendo en la actualidad, de ahí que existan contradicciones en la literatura arqueológica a la hora de establecer sus límites y de encajar en ellas desarrollos culturales. Estos problemas afectan a la inclusión o exclusión de amplias zonas de Venezuela, Colombia y Ecuador en el concepto de Area Cultural Andina, las cuales han pertenecido -en el esquema clasificatorio de las culturas americanas confeccionado por Willey- al Area Intermedia, tal como fue definida por Rouse. En la actualidad, estos territorios se consideran una faceta septentrional del Area Andina, con las consecuencias organizativas y sociopolíticas que ello conlleva, habiéndose establecido las siguientes subáreas:
Extremo Norte (regiones altas de Venezuela y Colombia).
Andes Septentrionales (Sur de Colombia, Ecuador y Norte de Perú).
Andes Centrales (Perú).
Andes Centro-Sur o Circum Titicaca (regiones en torno al lago Titicaca de Bolivia y Perú).
Andes Meridionales (Centro de Chile y Noroeste de Argentina)
Extremo Sur (Araucania)
Como es lógico, estos territorios no participaron en la civilización andina a lo largo de toda su secuencia, sino tan sólo en determinados momentos de su historia; en particular durante la superposición inca, que logró ciertos niveles de unificación económica, política y cultural a lo largo de toda la cordillera andina. De modo que nuestra línea de argumentación prestará más atención a los acontecimientos ocurridos en los Andes Centrales y CentroSur, cuyo conocimiento será ampliado con datos relevantes procedentes de otras regiones, consideradas aquí de manera secundaria.